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Zona particularmente delicada y sensible, la parte íntima necesita una limpieza y cuidados específicos y adaptados a su uso diario para evitar cualquier pequeña molestia; ¿Es necesario lavarse todo el tiempo? ¿Hay que usar toallitas? ¿Debemos evitar los tampones? Entre polémicas y malos hábitos ¡No sabemos ya cómo actuar!. ¡Aquí te presentamos unos consejos a reflexionar para cuidar de tu intimidad!

1 - Hay que elegir bien los productos limpiadores

Hay que elegir bien los productos limpiadores

Es bueno saber: se recomienda lavarse las partes íntimas una vez por día, dos en casos excepcionales pero no más, incluso durante los periodos de menstruación, ya que corres el riesgo de debilitar la flora vaginal que juega el rol de "protector natural de la vagina". Se trata de realizar un lavado externo únicamente, evitando las duchas vaginales que son mucho más agresivas e inútiles, ya que el interior de la vagina se autolimpia.

Entonces ¿Qué producto puedo usar para mi limpieza íntima? Para preservar el equilibrio de esta famosa flora vaginal, optamos imperativamente por un limpiador suave con pH neutro, nada más simple que eso. Existen numerosos productos especialmente formulados para la limpieza íntima.

El uso de toallitas debe quedarse para casos excepcionales y las elegiremos sin alcohol.

Los buenos hábitos:

  • • Preferir los culottes por encima de los tangas, y en algodón de preferencia, aunque podemos hacer algunas excepciones de tanto en tanto. ;-)
  • • Lavar la ropa interior a 40°C mínimo.
  • • Evitar los pantalones demasiado ajustados.
  • • Limpiarse desde el frente hacia atrás y no a la inversa.
  • • Lavarse las manos antes de todo contacto vaginal.
  • • Secarse bien después de la ducha y evitar permanecer mucho tiempo con un traje de baño húmedo...

2 - Utilizar la protección adecuada en el momento adecuado

Utilizzare la protezione giusta al momento giusto

Importante: el uso de protectores íntimos deben ser reservados al máximo a los periodos menstruales, salvo en ciertos casos excepcionales (embarazo, flujos importantes...), ¿De acuerdo? Evitar entonces el uso permanente de pantiprotectores ya que son muy irritantes para las partes genitales que necesitan estar ventiladas.

¿Qué protección usar durante mis periodos menstruales?

En función de tus hábitos y preferencias, podemos utilizar las tradicionales compresas o los tampones , que son más discretos pero objeto de cierta polémica...Si eliges los tampones, conserva de cualquier forma las compresas durante la noche para dejarles trabajar con las "buenas" secreciones vaginales de este período nocturno.

¿Porqué la polémica?

A fuerza de querer volver nuestros tampones y compresas demasiado sofisticados, los fabricantes utilizan productos químicos y tratamientos a base de cloro para hacerlos parecer lo más parecido al algodón.

Para evitar las reacciones alérgicas y las irritaciones, hay que inclinarse por los protectores compuestos de fibras naturales de algodón o biológicos. Otra alternativa es la copa menstrual. De caucho natural o silicona hipoalergénica, ¡Va ganando terreno de poco a poco! Económica, práctica, ecológica y confortable, ¿Qué más se necesita para elegirla?

Los buenos gestos:

  • • Cambiar de protector al menos 3 veces por día.
  • • No conservar el mismo tampón por más de 4 horas.

3 - En caso de pequeños malestares...

En caso de pequeños malestares...

Sequedad íntima, micosis vaginal, herpes, irritación, flujo vaginal, olores desagradables... entre otros pequeños malestares que nos dificultan la vida.

Hay numerosos factores, además de los malos hábitos de higiene y de protección íntima que pueden ser los provocadores de estos malestares, así como el uso de píldora anticonceptiva y descontroles hormonales (embarazo o menopausia) y la toma de ciertos medicamentos... pero también el estrés o el tabaco, por dar ejemplos.

Incluso si no siempre es fácil identificar la causa, afortunadamente es muy fácil de remediarlos con los tratamientos localizados y específicos para cada uno de estos pequeños problemas.

Y si estos pequeños malestares se vuelven frecuentes:

  • • Añadir a tus productos de limpieza, anti-irritantes, hidratantes...
  • • Pensar en los probióticos preventivos o durante los períodos "de riesgo" para restaurar la flora.
  • • ¡No dudes en hablar acerca de cualquier duda con tu ginecólogo! ;-)